En en camino de búsqueda de Gokuh aparece un enemigo inesperado: la Red Ribbon, un grupo de mercenarios que pretenden hacerse con las Dragon Ball a cualquier precio. El primer enfrentamiento del joven Saiyan es contra Silver Taisa, que destruyó la nube Kinton con un bazooka. Hay una lucha rápida y Gokuh se hace con un avión del ejército para huir, pero no puede hacerse con un control total de la nave y se estrella contra la torre de White Shojun , que está destinado allí, en el norte. El saiyan es rescatado por una niña, Snow, y ya en su casa se recupera del incidente y se entera de que el alcalde de su pueblo ha sido secuestrado para que los ciudadanos busquen la bola. Gokuh decide echarles una mano y se dirije a la fortaleza. Ya allí debe superar numerosos peligros: soldados andriodes, un nija llamado Murasaki, un monstruo de gelatina llamado Buyon... Uno de los soldados es A-8, Hatchan para los amigos, que desarrolla una especie de conciencia benigna, lo que le impide matar al pequeño y unirse a él en su acometida.

El último obstáculo lo representaba el propio sargento White, que disparó a trición a Gokuh, lo que despertó la furia del androide y golpeó a su superior con una fuerza tremenda. Así, el pueblecito de las nieves es liberado y Gokuh se dirige a la ciudad para que Bulma arregle el Dragon Radar. Cuando llega, Bulma se enfada con Yamcha y decide acompañar al jovencito. Se ponen en marcha para buscar la siguiente Dragon Ball, que resulta estar en lo más profundo del océano, cerca de la casa de Mutenroshi. Toda ayuda es buena, por lo que se llevan a Krilín junto con ellos. Pero al igual que en el norte, aquella zona también está destinada a un sargento, y éste los persigue de forma poco amistosa hasta la cueva del tesoro de un antiguo pirata. Lo pasan mal, pero logran salir con vida del entuerto. Aunque para su desgracia, Blue Shojun les robó las bolas que tenían y el Dragon Radar. Son Gokuh no se da por vencido y lo persigue hasta un pueblecito muy curioso llmado Villa Pingüino, donde conoce a Arale<, que es mucho más fuerte quél y acaba enseguida con el sargento Blue. Gokuh se hace con las bolas, pero el sargento consigue llevarse el radar. Lo lleva consigo hasta la base, pero Tao Pai Pai, un asesino a las órdenes de la Red Sosui, el mando supremo de la Red Ribbon, lo mata. El asesino en cuestión es enviado para eliminar a Gokuh, puesto que se interpone en los planes de la Red.

Tao Pai Paillega a los pies de la torre sagrada, donde asesina a su guardián, un indio llamado Bora y da a Gokuh por muerto. Pero el saiyan está vivo, y decide reunir las Dragon Ball para resucitar al padre de su amigo Upah. Decide subir la torre sagrada, donde se dice que en la cima vive el mismísimo Dios, para que le de de beber el agua sagrada. Cuando alcanza la cima, se encuentra con una gran construcción en forma circular. Allí se encuentracon un gato y su bastón. Dice llamarse Karin y dice que él tiene el agua sagrada. Gokuh está decidido a conseguirla para hacerse más fuerte, y al cabo de mucho intentarlo (pues Karin lo esquiva una y otra vez llevando en su bastón el agua). Cuando lo consigue y la bebe, descubre que es agua corriente, y Karin le confiesa que el verdadero entrenamiento estaba en subir hasta allí. Luego llama a una nube Kinton GIGANTESCA, y Gokuh puede volver a bajar en su nueva nube. Tras el duro entrenamiento que supone subir semejante torre, vence a Tao Pai Pai con facilidad. Para reunir las bolas que le faltan, se dirige al cuartel general de la Red Ribbon, donde elimina al ejército que allí quedaba. Se enfrenta a Black Hosa, que ha asesinado a su superior y pretende matar a Gokuh, pero, por supuesto, el saiyan acaba con él.

A Gokuh aún le falta la última bola, que estaba en posesión de Uranai Baba. Para conseguir su propósito, se ve obligado a luchar contra Drácula Man el vampiro, Miira la momia y Ackman el diablo. Pero la guinda del pastel fue Son Gohan, el abuelo de Gokuh. Finalmente logró hacerse con la bola y resucitó a Bora.

Gokuh prosiguió con su entrenamiento en solitario para luego apuntarse al 22º Torneo de Artes Marciales. Allí le esperan Krilín y Yamcha, ambos había entrenado duramente para aquel evento y estaban deseosos de probar sus fuerzas contra Gokuh. Pero en este Torneo los mayores adversarios con los que se encontraron fueron los alumnos de Tsuru Sennin, el eterno rival de Kame Sennin (Mutenroshi), y al igual que su maestro, los discípulos de éste eran crueles y despiadados. A lo largo de las eliminatorias Gokuh y compañía se fijaron en como luchaban aquellos adversarios contrarios a su escuela. Se fijaron principalmente en Chaoz, un chiquillo que no basaba su lucha en un enfrentamiento físico, si no que empleaba unos extraños poderes mentales para inmovilizar a su adversario.

Llegaron las semifinales, y primero se enfrentaron Gokuh y Krilín. La pelea resultó muy atractiva, puesto que ambos luchadores se conocían y sabían los punto débiles de uno y del otro. Pero esto le falló a Krilín, pues mientras le tiraba a Gokuh de la cola (ya le había vuelto a crecer), éste confesó que había entrenado su punto débil y ya no perdía las fuerzas al tirarle de ella. Por lo tanto, Gokuh fue el vencedor. El siguiente combate fue entre Jackie Chun y Ten Shin Han. El viejo maestro decidió abandonar el combate para dejar paso a las nuevas generaciones de luchadores (Ten Shin Han le hubiera vencido, aunque con mucho esfuerzo). Cuando Jackie abandonó el tatami, recomendó a Ten Shin Han que abandonara la escuela de la Grulla, porque su maestro no era buena persona.

La final fue muy emocionante, ya que se enfrentaban dos luchadores excepcionales con motivos suficientes para enfrentarse. A Gokuh lo empujaba el juego sucio de Ten Shin Han al derrotar a Yamcha, y Ten Shin Han por su parte, estaba deseando vengar la muerte de su anterior maestro Tao Pai Pai (que resultó ser hermano de Tsuru Sennin). El segundo tenía una clara ventaja sobre el primero, pues Ten Shin Han era capaz de volar, mientras que Gokuh debía mantenerse a su altura a base de tremendos saltos y Kame hame ha, lo que resultaba un claro derroche de energía. Ten Shin Han recurrió a una de sus técnicas, el Taiyoo Ken, que supuestamente cegaba a su adversario con la luz del Sol, pero Gokuh había sido rápido y se llevó de la cara de Mutenroshi sus gafas de Sol.

Tsuru Sennin se dio cuenta de que Gokuh era mejor que Ten Shin Han, y decidió intervenir de un modo muy sucio. Hizo que Chaoz< inmovilizara a Gokuh para darle una clara ventaja a Ten Shin Han. Cuando éste se dio cuenta de por qué Gokuh se comportaba de aquella manera de forma tan repentina, se enfadó y pidió que le dejaran luchar por sus propios medios. Tsuru Sennin se negaba rotundamente, pero Mutenroshi le ajustó las cuentas y el combate pudo proseguir. Ambos contendientes quedaban sin fuerzas, pero Gokuh perdió porque se dió contra un camión y pisó el suelo antes que Ten Shin Han. Esto valió para que se limaran sus diferencias y pudieron ser amigos.

Antes de poder llegar al restaurante para celebrar el acontecimiento, Gokuh se da cuenta de que ha olvidado la Dragon Ball y su bastón mágico. Krilín se ofrece en ir en su busca, pero para su desgracia, cuando llega, es asesinado a sangre fría por Tambourine, un extraño demonio. Gokuh presintió el peligro, y fue en busca de su amigo. Cuando lo encontró muerto, quedó horrorizado, y presa de la ira, fue tras el asesino. Pero estaba demasiado débil tras el combate y ni siquiera había probado bocado. Así que cuando alcanzó al demonio volador, éste destruyó su nube Kinton y le venció con suma facilidad dándolo por muerto.

Tambourine era un secuaz de Piccolo Daimaoh, que siglos atrás había sumido a la Tierra en el infierno. Fue detenido por Mutaito, el maestro de Mutenroshi y Tsuru Sennin, siendo herméticamente cerrado en una cápsula especial. Tras esto, Mutaito pereció, pues la técnica desgastaba toda la energía vital, y la cápsula fu escondida durante siglos en el fondo del mar... Pero Pilaf lo había liberado y ahora era uno de sus esbirros, que confiaba en que el Rey de los Demonios le concediera un par de países cuando conquistara el mundo. Piccolo Daimaoh era viejo, y Pilaf le habló de las Dragon Ball, y lo que el demonio pretendía era adquirir la eterna juventud. Para poder llevar a cabo sus planes, había enviado a su subordinado a por la lista de los que participaban en el Torneo para no tener adversario alguno al que enfrentarse, por lo tanto, Krilín no fue el único que pereció de aquella manera; tras él continuaron Nam, Giran, Panputto, Lobo hombre...

Gokuh está decidido a vengar la muerte de Krilín y trata de seguir a Tambourine a pie (no estaba muerto). En su camino conoce a Yajirobee, que se enfada y lo desafía porque se ha comido su pescado asado (fue el delicioso aroma del pescado haciéndose lo que despertó a Gokuh de su inconsciencia -este chico no tiene remedio-). Estaban peleando cuando hizo su aparición Timbal, otro secuaz de Piccolo Daimaoh, que era el encargado de reunir las siete Dragon Ball e iba en busca de la de Yajirobee. Éste se defiende con uñas y DIENTES y acaba con el demonio (se lo merendó en vista de haberse quedado sin pescado). Ambos se hicieron amigos y Gokuh acabó consiguiendo la Dragon Ball del montañés.





[Menú resúmenes]