Este saiyan llegaría a la Tierra cinco años después del combate entre Piccolo y Gokuh.
Su intención era la de reclutar a su hermano pequeño Kakarotto (que fue enviado para exterminar
a la raza humana), para emprender la conquista de un planeta. Ante la negativa de Gokuh
de aceptar su pasado como miembro de la raza de los Saiyans, Raditz secuestró al pequeño
Gohan para obligar al testarudo padre a cambiar de opinión. La terrible fuerza de Raditz obligó
a Gokuh y Piccolo a unir sus fuerzas en un desesperado intento de vencerle. A pesar de
luchar dos contra uno el saiyan les aventajaba notablemente y ningún ataque parecía afectarle
en lo más mínimo. Llegó a mentir a su hermano cuando éste lo tenía inmovilizado por la cola,
prometiendo que si le soltaba se iría para siempre. Y como no, Gokuh cayó en la trampa,
girándose así la situación a favor de Raditz. Solo la intervención de Gohan, loco de rabia
por la tortura que sufría su padre a manos del despiadado Raditz, debilitó suficientemente
al saiyan para que Gokuh le inmovilizara y Piccolo le lanzara un Makanko Sappo
que resultaría mortal tanto para Raditz como para Gokuh. Antes de morir informó a Piccolo
de la inminente llegada de sus hermanos de sangre a la Tierra en un año.
Técnicas y poderes
Como miembro de la raza de los Saiyans tenía un potencial notable, eso sí,
inferior al resto de sus compañeros. Su mejor ataque era el Double energy-ha
(ataque con el que seccionó un brazo a Piccolo).